Tipos de hombro para bandolera

Plegado. Es un diseño sencillo donde los extremos se pliegan tipo "acordeón" hacia el centro dejando los extremos hacia el exterior; esto hace que varias capas de tela den un efecto "acolchado" dejando el hombro grueso y mullido. No despliega la tela sobre el cuello ni sobre el hombro lo que lo hace muy cómodo en ese sentido. Tiene un despliegue limitado en la espalda debiendo poner especial atención a la hora de poner y ajustar para conseguir mayor cobertura en la parte de la espalda.

Recogido. Es de los diseños más sencillos y comunes en varias marcas de bandoleras. No lleva ningún pliegue y se despliega totalmente y al máximo en la espalda distribuyendo perfectamente el peso sobre una amplia superficie. Este hombro tiende a desbordarse sobre el brazo y ejercer presión en el cuello si no se coloca cuidadosamente.

Plegado simple. En este tipo de hombro los extremos se pliegan al centro una vez y luego hacia afuera resultando en un hombro ancho que se amolda perfecto a la forma del hombro pero que no despliega ni desborda tanto como el recogido. Es el más sencillo y muy funcional.

Plisado. Es el más vistoso y popular de todos los diseños; lleva una serie de tablones que hacen lucir sobre todo en los fulares con diseños rayados multicolor. Es el punto justo entre una extensión amplia en la superficie de la espalda sin desbordarse hacia el cuello o el brazo de quién lo usa.

Plegado inverso. Es exactamente igual que el diseño "plegado" solo que la abertura se coloca hacia el exterior; resulta en un hombro mullido y cómodo con mayor facilidad para extender la tela sobre la espalda.

Híbrido. Este diseño es una combinación entre el plisado y el recogido con la variante de que los tablones son mucho menos, se pliegan hacia el centro pero queda una amplia superficie de hombro. Se amolda perfecto al hueso del hombro cubriéndolo por completo reduciendo la cantidad de tela que baja por el brazo pero permitiendo extender bien la tela en la espalda.